La Casa Rosada puso en la mira el gasto público del gobernador Axel Kicillof como una condición para autorizar la toma de deuda en los próximos meses y asegura que la provincia de Buenos Aires incrementó un 2,1% en términos reales, es decir, por encima de la inflación, su gasto corriente durante la primera mitad del año.

Es el argumento central que esgrimió el ministro de Economía Luis Caputo el viernes pasado, en el que dijo que la administración bonaerense no cumple con el requisito de la ley de responsabilidad fiscal federal de mantener a raya el gasto como precondición para que la Nación permita operaciones de endeudamiento.

Desde la provincia de Buenos Aires mencionaron que las declaraciones del jefe del Palacio de Hacienda fueron "humo para la tribuna" y que en ocasiones anteriores la Casa Rosada ya autorizó colocaciones de bonos bonaerenses, y que no hay por el momento una mesa de conversaciones sobre esta cuestión.

El tema de la deuda provincial tomó fuerza ante las dificultades que experimentó Kicillof para asegurarse el aval parlamentario local, en primera instancia, para emitir US$ 3.685 millones para los próximos dos años presupuestarios. Tras ese permiso, cualquier provincia luego necesita autorización nacional para concretar alguna operación de esa naturaleza.

"Técnicamente lo que es deuda nueva hoy no debiera estar sujeta a aprobación porque (Buenos Aires) no está cumpliendo con la ley de responsabilidad fiscal. Hoy está aumentando los gastos corrientes por encima de la inflación", dijo Caputo el viernes. Kicillof, horas después, salió a pedir habilitación "rapidito".

La Secretaría de Hacienda que conduce Carlos Guberman elaboró un indicador nuevo que hace un seguimiento de la situación fiscal de las gobernaciones, y mide en base a datos oficiales de cada jurisdicción, cuál fue la evolución de los ingresos, los gastos y la deuda en cada caso.

Se trata de un "Mapa Fiscal", así planteado por los funcionarios de área, que tiene como objetivo monitorear esas variables provincia por provincia. Para el caso de Buenos Aires, el informe oficial marca que los gastos corrientes -que incluyen salarios y jubilaciones que paga el fisco bonaerense- crecieron 2,1% interanual en términos reales, por encima del ritmo de la inflación, hasta 15,7 billones de pesos.

Con información hasta el segundo trimestre del año, las erogaciones en sueldos del personal -la partida presupuestaria más onerosa- cayó 1,9% real, pero fue compensada por subas en Bienes y servicios (casi 50% más) y las Prestaciones de la Seguridad Social, que lo hicieron en 7,8%.

El mismo informe oficial estimó que hacia mitad de año el déficit financiero bonaerense ascendía al 5,7% de los ingresos totales de la provincia. Un año antes esa proporción era de 1,2%. Esos números son los que citan en Economía para poner en revisión la autorización de endeudamiento hacia Kicillof.

De todas formas, la información recopilada por Hacienda muestra que las tres jurisdicciones que fueron habilitadas para colocar deuda en dólares con ley internacional en Wall Street también aumentaron en lo que va del 2025 sus gastos corrientes por encima de la inflación.

Por caso, Santa Fe, la última en hacerlo por US$ 800 millones la semana pasada, tuvo una variación aún mayor en términos reales de su gasto, en 7,9%, de acuerdo al Ministerio de Economía nacional. El fisco santafecino tuvo hasta el segundo trimestre del año un déficit financiero equivalente a 1,9% de sus ingresos.

La Ciudad de Buenos Aires también registra el mismo comportamiento de sus erogaciones. La administración porteña los aumentó en 6,6% por encima de la inflación, aunque a diferencia de Buenos Aires y Santa Fe, acumula un amplio superávit de 14,7% de sus ingresos. Lo mismo sucede con Córdoba: sus erogaciones crecieron en términos reales nada menos que 19,6%, aunque muestra un superávit equivalente a 7,2% de sus ingresos.

Es un escenario que se repite para otras dos gobernaciones que, con fechas todavía inciertas, también apuntan a conseguir financiamiento en el mercado internacional. Chubut aumentó su gasto 32,4% real interanual; y Entre Ríos lo hizo en 9,4%.

SN