Con el aval de la Unión Cívica Radical (UCR), la Cámara de Diputados validó el veto del presidente Javier Milei a la movilidad jubilatoria y aseguró el ajuste del Gobierno nacional. Sin embargo, durante su discurso, la diputada Lourdes Arrieta --eyectada del bloque libertario tras el escándalo de la visita a genocidas a la cárcel-- criticó la decisión del Presidente y dio a entender que su voto iba a ser negativo, pero finalmente se abstuvo. "Quiero decirles que los jubilados para nada son un pasivo fiscal", aseguró la legisladora.

"Cuando milité el año pasado, milité justamente por las ideas, bancando a nuestro presidente y creyendo que el ajuste iba a ser para la casta, iba a ser para aquellos que se quedan con los negocios del Estado, pero no para los jubilados", dijo la legisladora que preside el monobloque "Fuerzas del cielo - Espacio liberal".

Los jubilados "tienen que afrontar un momento de crisis, que entiendo y respeto a las políticas de shock, pero también entiendo a cada jubilado, porque camino, porque viajo en subte, porque me muevo para todos lados sin ningún privilegio", espetó la legisladora.

Respecto al aumento para los jubilados que había aprobado el Congreso, Arrieta se manifestó a favor, aunque cuando le tocó votar esa ley su voluntad había sido negativa. "Creo firmemente que sí debería el aumento hacerse factible, había una propuesta del 8,10 por ciento que se debía abonar y después ir pagando como podía el Estado" (sic), aseguró la diputada.

Finalmente, se manifestó en contra de que los jubilados "mueran esperando un resarcimiento, un aumento".

La ley de movilidad jubilatoria vetada por el mandatario beneficiaba a los jubilados respecto a la fórmula implementada por el Gobierno. Entre otros puntos, establecía: