"Me quiero sentar a lado de ese hombre...", dice Duván Vergara y elige una butaca en el sector de plateas del Cilindro de Racing. Ese "hombre" del que habla está representado en esa estatua "sentada" en primera fila en homenaje a Carlos Gardel, leyenda argentina cuya figura acaba de ver por primera vez en su vida. "¿Era jugador?", pregunta. "Si alguna vez te dicen que sos Gardel, tomalo como un elogio", le cuentan al nacido en Colombia, tierra donde, justamente, murió el máximo exponente en la historia del tango, un 24 de junio de 1935, en Medellín.

Un corte y una quebrada y el refuerzo de Racing comienza un mano a mano con Olé. El Zorzal Criollo, siempre risueño, parece testigo silencioso de una charla en al que el extremo de 29 años que transmite ansiedad por debutar con la camisera de Racing (lo haría el sábado ante Barracas Central).

El refuerzo de la Academia expone sueños de Libertadores, cuenta el fervor desenfrenado de Costas. Revela lo que le dijo Juan Fernando Quintero sobre Racing en América de Cali. Se ilusiona con una vidriera que le permita llegar a su selección por primera vez. Recuerda su paso fallido por Rosario Central. Y se sube a una revancha. Un paso de tango por acá, otro por allá.

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Su gran anhelo

-¿Qué fue lo primero que le contaste de Racing a tu gente de Colombia?

-He tenido la oportunidad de hablar con varios amigos de la infancia, y con la familia. Lo primero que les dije es que ¡hace un frío impresionante en Argentina! Yo soy del calor, je. Igual, ahorita ya bajó el frío. Y segundo, el trato que me están dando. Los compañeros, la directiva, los técnicos... Me hacen sentir en casa desde el primer día que llegué. A la hinchada ya la voy a conocer... El sábado, si Dios lo permite y estoy bien, tendré la oportunidad de estar. Espero ver el estadio lleno. Me gusta sentir esa pasión. Y después contaré esa bonita experiencia.

-¿Firmaste algún autógrafo ya?

-Sí, varios. El día que llegué a Racing fui a cenar con mi representante y firmé dos o tres. Casi no salgo del hotel, pero cuando voy por ahí alguno me reconoce.

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Lo que puede aportarle al equipo

-¿Cómo esperás el sábado?

-Quiero debutar. Y gana, primero que todo. Siempre quiero ganar. Si Dios me regala un debut ganando y con un gol, bendito sea. Lo importante es ganar y que el club esté bien representado en la punta.

-¿Qué pensás de Racing en la Libertadores?

-Somos candidatos a ganarla. Racing ya se ganó la Sudamericana y, por qué no, la Libertadores. Yo tuve la posibilidad de jugar tres Libertadores y dos Copa Sudamericana. Sé lo duro que es. Pero este equipo está preparado para ganar la Libertadores.

-¿Qué tan cerca te ves de cumplir ese sueño?

-Me veo cerca de ganarla por la clase compañeros que hay. Te exigen día a día y eso es importante. Es un sueño ganar la Libertadores, ahorita que la tengo cerca. Y también, llegar a la Selección. Nunca estuve pero siento que aquí me van a ver más.

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Jugará en la posición de Maxi

-¿Juanfer Quintero te habló de Racing?

-Sí, me dijo que si venía a Racing me iba a encontrar con un excelente grupo, que venía a competir. Me dijo que me iba a sentir querido. Me dijo que la gente de Racing es muy pasional, que es una locura. Yo soy un jugador que se identifica mucho con la gente. Siempre salgo a divertirme, y cuando la cancha está llena me gusta mucho más. Hace un par de mercados también estuvo el interés de Racing y no se dio. Primero había hablado con Carbonero. Y me habló muy bien del equipo.

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Las gratas sorpresas

-¿Qué verá el hincha de vos?

-Gracias a Dios, vengo en un buen presente después de una lesión que tuve en México (rotura de ligamento cruzado de rodilla derecha). Por eso Racing se fijó en mí. Porque todo depende del rendimiento de uno. El hincha se va a encontrar con un Duván mucho más maduro, que este año cumplirá 29 años. Un jugador con buen recorrido, que ha tenido la oportunidad ya de ganar. Siempre voy para adelante, voy a pelear todos los balones. Me gusta encarar y últimamente hice muchos goles. Espero seguir con esa racha, lo importante es que el equipo siempre gane.

-¿Cómo te llevás con el aspecto defensivo?

-Cuando comenzás con esto pensás una cosa. Después, el fútbol se vuelve muy táctico. Hay que competir y no basta sólo con el talento. Tuve un técnico argentino que me pedía eso, Juan Cruz Real. Estoy capacitado para eso. Obviamente que en un momento uno se agota, pero ya con mi experiencia puedo regular porque sé correr la cancha.

-¿Qué pensás que piensa el hincha de vos?

-Yo ya no soy un niño... La gente espera mucho de mí por mi presente. Y además, ahorita salió Salas. Y dicen que voy a esa posición. Tengo que llenar esas expectativa de ellos con mi fútbol y con goles. Siempre quiero ganar y divertirme.

-¿Con qué técnico te encontraste?

-Costas es un loco ganador. Cuando me llamó, ni me saludó: 'Duván, ¿querés venir?', me preguntó. Yo le respondí que sí. '¿Estás contento? Vamos a ganar todo. Lo que sea pero lo vamos a ganar', me dijo. Eso me dio un plus para venir a competir, me lo inculcó. Me dice que está las 24 horas para ayudarme en lo que necesite. 'Estoy para tí, quiero que estés tranquilo, vamos a ganar, a ganar y a ganar', me repite. Ahorita sólo pienso en ganar.

-¿Te ves similitudes con el juego de Salas?

-Él es muy aguerrido, pero en el mano a mano va para adelante y somos parecidos. Yo tengo mucho gol y él hizo varios. Cuando estuvo en Necaxa (México), yo lo enfrenté (con Monterrey), me acordé el otro día cuando lo vi.

-¿Qué jugadores te impactaron más del plantel?

-Me gusta Sosa, juega muy bien. Almendra, muy tranquilo, juega muy bien. Todos juegan muy bien. Pero por ahí ellos, y Maravilla... Maravilla no sé como hace tantos goles. En las prácticas hace muchos. Y el zurdo, Gabi (Rojas), también juega muy bien. Me dijeron que el Uru (Martirena) también es bueno, pero casi no pude entrenarme (está volviendo de una lesión).

-¿Es cierto que no sos de mirar fútbol?

-Sí, no me gusta. Casi no miro fútbol. Me gusta jugarlo, no verlo. Si tengo un amigo que me dice que va a jugar tal partido, lo miro. Pero no soy de los que van a buscar un canal para colocar un partido de fútbol.

-Tuviste un paso por Argentina, cunado jugaste en Rosario Central en 2009. ¿Qué recordás de esa época?

-El paso mío por Central no fue tan bueno. El club como tal es muy bueno, pero los directivos no le estaban dando un buen manejo. No la pasé bien acá. Había decidido no volver a jugar en el fútbol argentino, se lo dije a mi mamá. Pero Dios me dio una lección y me hizo volver y estoy feliz después del proyecto que me presentó Racing.

-¿Por qué lo pasaste mal?

-No me pagaban. Y yo no tenía recursos como para sostenerme. Pero ahora me dicen que el club está muy bien. Su estadio está muy hermoso y las instalaciones del club siempre fueron muy buenas. Ahora vino Di María...

-¿Hubo algún quiebre en tu carrera que te haya marcado?

-La pasé muy mal cuando me rompí los ligamentos cruzados de la rodilla (derecha) hace dos años y medio o tres. Pero eso me hizo amar más al fútbol, me enseño a cuidarme, a querer más el gimnasio... A valorar á mi familia, a estar más tiempo con ellos. Crecí como persona. Y le cogí más amor al fútbol. Después de aquella lesión me cuido mucho en las comidas para evitar lesiones, tengo una dieta especial. La alimentación me ayuda a rendir mejor.

-¿Con quién estás viviendo en Buenos Aires?

-Ahorita estoy solo, vivo con una tía que me hace todo y un primo. Y mi mamá siempre está yendo y viniendo desde Colombia, me traer a mis niños. Y a veces, cuando puedo, ella me hace la comida que más me gusta.