Pocos eventos generan un sentimiento como la emoción de una apertura de los Juegos Olímpicos. Y París no fue la excepción y fue quizás de las presentaciones más espectaculares en la historia. Desde el innovador desfile de cada delegación por el Río Sena, hasta el final a todo trapo con Rafael Nadal, Zinedine Zidane y Serena Williams, tres íconos del deporte mundial que le dieron el toque final a una ceremonia que tuvo de todo: desde Snoop Dog y las luces emocionantes de la Torre Eiffel que iluminaron una noche espectacular bajo la lluvia hasta la antorcha flotante.

Nada puede ponerle un freno a una presentación olímpico, aunque los Juegos ya tienen tres jornadas de acción en sus hombros, ya que el fútbol y el rugby comenzaron sus encuentros desde el miércoles 24, este viernes fue la ceremonia inaugural de los Juegos Olímpicos de París. Y claro, el último tramo de la ceremonia suele ser el más emocionante, porque es la conclusión de una fiesta espectacular que marca el inicio del evento más importante a nivel deportivo.

Y es por eso que los últimos en portar la antorcha olímpica que encenderá el pebetero son los referentes más preponderantes en la historia del deporte del país en el que se desarrolla, en este caso, Francia. Y claro, el primer en aparecer nada más y nada menos que Zinedine Zidane, campeón del mundo en 1998 y uno de los futbolistas más grandes en la historia del deportes galó.

El ex extrenador del Real Madrid ingresó por la pasarela central del evento y fue ovacionado por todos los presentes para entregarle la antorcha a uno de los más grandes deportistas de la historia: Rafael Nadal. Y Rafa es uno de los grandes escritores de la historia deportiva de París. El Torero ganó nada más y nada menos que 14 ediciones de Roland Garros, uno de los cuatro grand slams.

El español tomó la antorcha de la mano de Zizou y siguió camino al Rio Sena, mientras la Torre Eiffel lanzaba un fascinante show de luces bajo la incesante lluvia que azotó a la capital francesa durante toda la tarde noche. Y el rubro no cambio, porque Rafa se subió a un bote en el Rio Sena en el que lo esperaba nada más y nada menos que Serena Williams, ganadora de dos Roland Garros en 1999 y 2010.

Con Rafa y Serena al mando de la antorcha, ambos se acercaron a una de las orillas del Rio Sena en la que esperaba Amélie Mauresmo, ex tenista francesa que fue número 1 del ranking y medallista olímpica en Atenas 2004. En una larga recorrida, la directora de Roland Garros, le entregó la antorcha a Tony Parker, ex basquetbolista francés de San Antonio Spurs que jugó 18 temporadas en la NBA y fue capitán del seleccionado francés.

Tras el pasaje, Tony y Amélie cruzaron el museo del Louvré para cederle la antorcha a deportistas paraolímpicos que siguieron recorriendo París hasta entregarle la antorcha a Teddy Riner, judoka francés once veces campeón mundial y tres veces medalla dorada, y Marié-José Perec, atleta francesa que fue medallista olímpica en tres ocasiones

Y el gran cierre de la noche fue inesperado. Rinner y Perec encendieron la antorcha olímpica, que terminó siendo una sorpresa increíble, ya que la misma cuelga de un globo aéroestatico que quedará encendido desde hoy hasta el cierre de los Juegos Olímpicos de París 2024.

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