Si hay algo que sorprende es que Miguel Ángel Russo se equivoque en los detalles. Nunca cayó, en su carrera, en una situación así. Sin embargo, en el entretiempo se produjo una acción insólita en la estuvo involucrado Miguel Merentiel y Milton Giménez.

El ex Banfield, que había empezado en el banco de Boca, estaba sobre la raya lateral, listo para ingresar. Y el aviso fue que el cambio era por Miguel Merentiel. Pero el atacante uruguayo apareció dentro de la cancha para continuar. Y, sorprendido, le gritó al banco del Xeneize: “¿Yo tengo que salir?”.

Fue entonces cuando Miguel Ángel Russo le dijo a Claudio Úbeda: “Hacé el cambio”. Ahí, Merentiel observó el cartel con el número de camiseta, 16, que él debía salir, y empezó a correr rumbo al vestuario, bastante sorprendido. Dejando expuesto a Miguelo con que no fue un cambio producto de la lesión, sino una decisión táctica que no deja de ser llamativa.

Fue una situación inédita, al borde del papelón, porque cualquier técnico le avisa a un jugador cuando va a salir en el entretiempo. Es evidente que falló la comunicación. O Russo no avisó o Merentiel no escuchó. “Fue un problema de papeles con el cuarto árbitro, no vean cosas que no son”, fue la insólita respuesta de Russo, que encima se enojó con la consulta.

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Sin embargo, la desatención en el vestuario no es lo único que asombra, sino que la apuesta por Giménez, y dejando en cancha a Cavani por encima de Merentiel, el mejor jugador desde su llegada y el único que en este Boca tiene la capacidad para generarse una ocasión de gol, es más llamativo. Esto deja expuesto a un Miguelo que no encuentra respuesta en el equipo y prueba mucho en la delantera buscando soluciones, pero siempre desprestigiando al goleador y referente de su Boca.

Porque el nivel de los uruguayos en el primer tiempo, no pedía la salida de la Bestia, sino que Cavani era el que parecía cambio cantado porque no tuvo contacto con la pelota, se lo notó muy estático y encima no generaba nada en ataque. Y la acción que más lo reflejó fue un pelotazo largo de Paredes al Matador, que directamente decidió no correr. A diferencia de Merentiel, que corrió e incluso se generó una acción contra cuatro jugadores del Globo.

Y, en definitiva, Giménez aportó menos que Merentiel. Sumó otro nueve alto con poca dinámica y quedó sin peso en la banda, porque ni Cavani ni Milton se sienten cómodos tirándose ahí. Así, Russo no solucionó el problema de la generación de juego y con los tres nueve que puso no pateó al arco.

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