Esta vez Boca no necesitó tanto de él. No quiere decir que Sergio Romero no haya sido importante en la clasificación a los octavos de final de la Sudamericana luego del triunfo 1-0 ante Independiente del Valle en la Bombonera. Pero sí es una realidad es que el equipo pudo sortear un mano a mano sin necesidad de llegar a los penales, en donde el 1 fue determinante el año pasado para llegar a la final de la Libertadores. Pero como dijo Edinson Cavani, ahora empieza la verdadera Copa y por eso la advertencia de Chiquito antes de enfrentar a Cruzeiro.

"Hace rato que no se lograba ganar un mano a mano en los 90 minutos. Pero bueno, son cosas para seguir sumando. Es importante haber marcado un gol, que el grupo se haya ido con el arco en cero, a partir de esto tenemos que comenzar y seguir creciendo", empezó diciendo Romero.

Y enseguida, la advertencia: "Ahora en los mata y mata vos sabés cómo es, no podés dar un paso en falso ni de visitante ni de local. Pero tenemos un grupo humano muy bueno que se apoya, que siempre tira apara adelante y que sabemos que puede darle mucho a Boca".

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"El resultado lo conseguimos allá en la altura, porque fuimos con un equipo en donde no teníamos a todos, donde el mediocampo eran todos de Boca Predio, los chicos se la bancaron, ya son adultos, no son más chicos. Fue clave no perder ese partido de visitante. Después en casa supimos manejarlo con la experiencia", dijo Romero después de la victoria a Independiente del Valle.

Y completó: "Para nosotros era una final. Para este club cada partido de una Copa, cada partido que se juega hasta en el torneo local son finales. Lo sentimos de esa manera. Hay que ganar. Nos dijimos en el vestuario que era lo que necesitábamos y había que jugarlo como una final".

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