Presupuesto: el bloque de Pichetto desafía al oficialismo con un dictamen que aumenta partidas a jubilados, universidades y provincias
Para mantener el déficit cero, Encuentro Federal propone eliminar exenciones impositivas, reducir el financiamiento de la actual ARCA y reasignar partidas sobredimensionadas, como la SIDE y la Secretaría General de la Presidencia, a cargo de Karina Milei
Ante la parsimonia que demuestra el oficialismo en las negociaciones con la oposición por la ley de presupuesto 2025, el bloque de diputados de Encuentro Federal, encabezado por Miguel Pichetto, decidió marcar la cancha con una serie de propuestas para aumentar las partidas para los jubilados, las universidades y las provincias con el ahorro fiscal en otras áreas del Estado.
“Ratificamos nuestro compromiso con la salud de las cuentas públicas y el equilibrio fiscal –enfatizaron los diputados de Encuentro Federal, comandados por Pichetto y Nicolás Massot, uno de los artífices del dictamen-. Coincidimos con el Gobierno en la necesidad de una política fiscal responsable, prudente y sostenible en el tiempo como condición necesaria para alcanzar la estabilidad macroeconómica, pero esta condición no es suficiente para avanzar en un sendero de crecimiento económico sustentable.”
El bloque encabezado por Pichetto anunció un dictamen propio de presupuesto que, sin alterar la regla del déficit cero que fijó el presidente Milei, permita mejorar los ingresos de los jubilados –con la recomposición del 8,1% de suba no reconocida por el Gobierno por la inflación de enero pasado-, aumentar en un 17% las partidas para las universidades y hacer automáticas las transferencias del Tesoro nacional a las cajas jubilatorias provinciales que no fueron transferidas, las cuales no recibieron un peso este año.
Para solventar estas subas, los legisladores de Encuentro Federal proponen eliminar algunas de las exenciones tributarias que benefician determinados sectores y actividades y eliminar la asignación específica del impuesto a los combustibles para engrosar los recursos de la masa coparticipable.
Asimismo, plantean reasignar aquellas partidas del presupuesto que, a juicio de los opositores, están “sobredimensionadas”: apuntan a la Secretaría General de la Presidencia –a cargo de Karina Milei, que recibirá el doble de fondos el año próximo-, la vocería presidencial y la Secretaría de Inteligencia del Estado (SIDE).
Según las estimaciones de los opositores, estos retoques presupuestarios permitirán un ahorro de $5,1 billones, alrededor de 0,67 punto del PBI.
“La idea es balancear más equitativamente el costo del ajuste que hoy enfrenta no únicamente ‘la casta’ sino la ciudadanía en su conjunto. Es decir, queremos incorporar otros criterios productivos y distributivos para la asignación de gastos que hoy están ausentes en el presupuesto”, indicaron.
No solo eso: también propondrán modificar la redacción del artículo que impone la regla del déficit cero en el presupuesto, uno de los más sagrados para el Gobierno. Los opositores sostienen que es muy probable que la recaudación del año próximo sea mayor a la que prevé el oficialismo porque, advierten, la inflación superaría el 18% estimado por el Gobierno en su proyecto.
“Si la recaudación fuera mayor a la prevista, el Gobierno debería bajar los impuestos, empezando por las retenciones”, desafió Massot.
El dictamen de Encuentro Federal propone no solo recomponer los haberes jubilatorios con la suba del 8,1% que el Gobierno no reconoció por la inflación de enero pasado; también pretende incorporar al haber jubilatorio los bonos de hasta $70.000 para garantizar su movilidad, ya que el Gobierno prevé mantenerlos congelados el año próximo.
Un tema clave para este bloque es dar solución al problema que desvela a los gobernadores de aquellas provincias que no transfirieron las cajas previsionales a la Nación. Como primera medida impondrán plazos para que la Anses realice las auditorías correspondientes y, en caso de que éstas demuestren estar saneadas, se automatice el envío de los fondos compensadores que, según estiman, deberían triplicar los asignados en el presupuesto oficialista.
Para financiar estos aumentos, los opositores proponen eliminar distintos beneficios tributarios, entre ellos el que exime del pago del IVA a los directores de empresa, a la construcción y a los diarios y revistas. Asimismo, propone nacionalizar el Fondo para la Ampliación de la Matriz Productiva Fueguina (FAMP), que se nutre con un porcentaje del IVA del régimen especial de Tierra del Fuego. Esos fondos comenzarán a nutrir al Tesoro Nacional.
Asimismo, proponen reducir el financiamiento del organismo recaudador de impuestos, la flamante ARCA. Éste se nutre del 1,9% de la recaudación tributaria y aduanera: los opositores proponen bajar este porcentaje al 1,52% luego que el Gobierno anunciara un achicamiento de su estructura. Por otra parte, los opositores reclamarán que la recaudación de los entes cooperadores ACARA y CCA, a cargo del Ministerio de Justicia, pasen a rentas generales.
Para solventar el aumento del 17% de las universidades, las fuentes de financiamiento serían los ahorros logrados con la eliminación de los sobrecargos de intereses con el Fondo Monetario Internacional ($435.000 millones); la eliminación de la exención del IVA para espectáculos públicos y una reducción en $165.000 millones en el cupo fiscal de la ley de economía del conocimiento.