La decisión de Javier Milei de quitarle a Cristina Kirchner la jubilación de privilegio como expresidenta y la pensión como esposa de Néstor Kirchner reavivó la polémica sobre este régimen especial, creado en 1991 durante la presidencia de Carlos Menem y que beneficia de por vida con haberes muy superiores al que les correspondería por sus aportes a quienes ejercieron la presidencia de la Nación y la vicepresidencia.

Actualmente, además de Cristina Kirchner, otras 12 personas cobran jubilaciones o pensiones de estas características. La nómina incluye a familiares que heredaron el privilegio. Según datos oficiales obtenidos en agosto pasado por LA NACION, el monto total bruto de lo percibido por los 13 era de $121.307.650,55 millones de pesos, el equivalente a 410 haberes mínimos. Los valores se actualizaron a la par hasta ahora (en noviembre la mínima fue de $252.798 más $70.000 de bono).

El último en sumarse a esa lista selecta fue Alberto Fernández, que inició los trámites que requiere la ley apenas terminó su mandato presidencial, el 10 de diciembre pasado.

Milei argumentó que Cristina no seguirá cobrando la jubilación especial por cuestiones “morales”, a partir de la decisión de la Cámara de Casación de confirmar la condena a la expresidenta en la causa Vialidad. Sin embargo, en la lista de los que continúan cobrando hay otros exfuncionarios que fueron condenados, como Amado Boudou (con condena firme) y Carlos Menem (con su pena confirmada por la Cámara de Casación, como Cristina Kirchner).

Según la información oficial, la señora de Kirchner cobraba 21 millones de pesos en mano (35 millones brutos) por el doble beneficio que ahora dejaría de percibir. Ella cuestionó la facultad para tomar esa decisión de Milei, a quien llamó “dictadorzuelo”.

Ninguno de los otros integrantes de la lista cobraban tanto. Los nombres, en función de la magnitud del beneficio, son los siguientes:

El presidente que Cristina Kirchner propuso en 2019 y gobernó hasta diciembre de 2023 consiguió en marzo pasado la aprobación del trámite. En agosto, según datos oficiales, le correspondió un total de $14.272.997,79 en bruto, una cifra que en términos netos (de bolsillo) resulta de $10.000.630,64. A ese monto mensual inicial, definido por la resolución 4643 de la Anses, se la sumó la percepción de un importe, por lo correspondiente al retroactivo contabilizado a partir del pedido de la prestación, de $32.207.388,83.

El dato se conoció cuando estalló el escándalo de la denuncia por violencia de género presentada por su expareja Fabiola Yañez y mientras avanzaba una investigación por corrupción en los seguros del Estado. Por esta última causa, Fernández fue citado a declarar como acusado por el juez Julián Ercolini. El fiscal Ramiro González pide que también se lo convoque a indagatoria por el expediente Yañez.

El líder del Pro tiene una jubilación especial que, según los datos obtenidos por LA NACION, en agosto, era de $11.196.564,35 brutos y $7.221.204,90. Completó los trámites en 2020 poco después de dejar el poder.

Fue presidente interino y duró apenas una semana en los turbulentos días de diciembre de 2001, pero desde hace más de 20 años cobra su pensión vitalicia. Durante la mayor parte de ese tiempo siguió siendo funcionario público, en especial senador nacional por San Luis (la provincia que gobernó entre 1983 y 2001). En agosto cobró $10.729.892,24 bruto y $6.949.67, apenas un poco menos que Macri.

Zulema Yoma cobra la pensión vitalicia derivada de la jubilación de privilegio que tramitó Carlos Menem, que fue su esposo desde 1966 hasta 1991, cuando se divorciaron en medio de un escándalo que tomó estado público cuando él era presidente de la Nación. Menem se volvió a casar con Cecilia Bolocco, en 2001, pero se divorció años después. En el final de su vida, volvió a convivir con Yoma en el barrio de Belgrano.

A su muerte, en febrero de 2021, ella siguió cobrando la pensión, que a números de agosto pasado era de $9.218.365,90 en bruto y $5.623.216,07 neto.

Menem había sido condenado en primera y segunda instancia en un caso de sobresueldos, pero el gobierno de Milei -que lo admira- no tiene previsto quitarle a Yoma el privilegio que ordenó retirarle a Cristina Kirchner.

La vicepresidenta de Macri gestionó su jubilación como vicepresidenta en 2020, cuando el gobierno de Cambiemos dejó el poder. Cobraba en agosto $8.133.564,41 brutos y 5.439.029,93 netos. Lleva tiempo fuera de la primera línea de la política, aunque recientemente se dejó ver en actos partidistas del Pro.

Su vicepresidenta quedará indeleblemente marcada por el voto “no positivo” de la ley de retenciones móviles, en pleno conflicto con el campo en 2008. Aquel episodio marcó la ruptura con Cristina Kirchner, su compañera de fórmula en 2007.

Hoy es diputado nacional por Mendoza, nuevamente por la UCR. Cobraba en agosto una jubilación de privilegio de $8.047.422,41 en bruto y $4.941.922,12 neto. Según explicó, dona estudiantes de arquitectura (su profesión) la dieta como legislador. Su trámite se aprobó en 2013, dos años después de dejar el cargo de vice. El trámite salió con dos años de demora y obtuvo un importante retroactivo, que según informó en su momento lo donó a organizaciones caritativas.

La viuda de Fernando de la Rúa, el presidente que renunció en el clímax de la crisis de 2001, cobra una pensión vitalicia que ascendía en mayo a $7.851.859,22 brutos y $5.275.124,46 neto. De la Rúa murió en 2019.

Tiene 98 años y es la esposa de Roberto Levingston, un militar que gobernó el país de facto entre 1970 y 1971. Él murió en 2015 y su jubilación de privilegio pasó a su esposa, madre de tres hijos. En agosto cobró $7.249.355,37 bruto y $6.821.247,68 neto.

Tiene una condena firme en el caso Ciccone. Consiguió su pensión en 2020, poco antes de salir de la prisión. Cumplió sus cuatro años de mandato como vicepresidente de Cristina Kirchner, entre 2011 y 2015. Su haber al mes de agosto era de $6.814.271,58 brutos y $4.910.429,68 neto. En el Gobierno anticipan que ahora aspiran a quitarle el privilegio, al igual que hicieron con la expresidenta.

La viuda de Juan Domingo Perón cobra su jubilación como expresidenta (y no la pensión de su esposo). Ella lo sucedió a él en julio de 1974 y gobernó hasta el golpe de 1976. La dictadura la tuvo presa y después de su liberación se radicó en España. Hace más de 35 años que no pisa la Argentina. Su última aparición pública fue a raíz de una visita que le hizo la actual vicepresidenta Victoria Villarruel. En agosto cobraba $5.784.322,59 brutos y $4.293.296,44 neto.

Es la única pensión de privilegio que cobra el descendiente de un expresidente, en este caso José María Guido, que gobernó desde el 29 de marzo de 1962 hasta el 12 de octubre de 1963 (después del golpe militar que derrocó a Arturo Frondizi). Él era el presidente provisional del Senado.

Guido murió en 1975, pero su esposa, Purificación Areal, tramitó la pensión. A su muerte, en 1999, el gobierno de Carlos Menem le mantuvo el privilegio a Amalia Carmen Guido, psicóloga, nacida en 1948 y que actualmente vive en Viedma. El argumento fue entonces que la mujer “era soltera”.

Cobraba en agosto $7.249.355,37 en bruto y $6.821.247,68 neto.

Cobra su pensión como vicepresidente de Néstor Kirchner, cargo que ejerció entre 2003 y 2007 antes de convertirse en gobernador de Buenos Aires. Actualmente es secretario de Deportes, Turismo y Ambiente del gobierno de Javier Milei. Eligió asumir ese cargo ad honorem y seguir cobrando la jubilación de privilegio, que en agosto cobró $5.582.932,28 en bruto y $3.182.597,16 neto.