El laboratorio argentino Sinergium Biotech comenzó la investigación para el desarrollo de una vacuna contra la gripe aviar dentro de un programa de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que permitirá prepararse contra una posible pandemia. El proyecto trabaja con la tecnología del ARN mensajero (ARNm), usada contra el Covid-19, y se inicia en un contexto de crecientes contagios de virus H5N1 (de gripe aviar) en mamíferos. En junio se confirmó la primera muerte humana, un hombre en México sin antecedentes de contacto directo con aves silvestres. 

Esta semana, la OMS  anunció el nuevo proyecto de desarrollo y accesibilidad de vacunas experimentales de ácido ribonucleico mensajero (ARNm) contra la gripe aviar (H5N1) para los fabricantes de países de ingresos medianos y bajos. Forma parte del programa de Transferencia de Tecnología de ARNm de la OMS y el Medicines Patent Pool (MPP) y el laboratorio Sinergium Biotech desarrollará la vacuna para después compartir el conocimiento con otras empresas para agilizar la fabricación ante una posible pandemia. Este laboratorio forma parte del grupo Insud, fundado por Hugo Sigman y Silvia Gold. Otra empresa del grupo, mAbxience, estuvo a cargo de la producción del principio activo de la vacuna contra el Covid-19 de AstraZeneca, desarrollada por la Universidad de Oxford, para América Latina.

“Tenemos 14 diseños de candidatos vacunales, estamos en la etapa de descubrimiento y prueba de concepto.  Son ensayos en animales en curso y ensayos in vitro. Los resultados vienen muy bien”, le dijo a elDiarioAR Germán Sánchez, gerente de I+D de la empresa argentina.

Una de las preocupaciones de los investigadores es la extensión acelerada del virus, no solo en aves sino también en mamíferos. En Estados Unidos se registraron brotes en vacas de ocho estados y se detectó el virus en leche no pasteurizada, que derivó en trabajadores con la enfermedad. En 2022, la gripe  produjo mortalidad en lobos y elefantes marinos de Perú, Chile y Argentina. También está presente en la Antártida. Si bien en Europa la gripe aviar se mantiene solo en aves silvestres, están en alerta por la rapidez con la que se mueve el virus. 

“Realmente lo que está ocurriendo a nivel animales es un brote, una pandemia a nivel zoonótico. Hay mucha potencialidad de que eso pueda seguir avanzando y el problema es cuando la influenza se empieza a mezclar. Principalmente porque este virus se puede llegar a mezclar con un virus estacional y de esa forma adquirir capacidades de ingresar al humano. Hoy en día no ingresa fácilmente al humano a menos que tenga algún evento de recombinación con otro virus como puede ser un virus estacional”, detalló Sánchez.

En junio de este año, la OMS confirmó la primera muerte por gripe aviar H5N2. Se trata de una persona de 59 años que murió el 24 de abril en México después de tener fiebre, dificultad respiratoria, diarrea, náuseas y malestar general. Se trata del primer caso humano confirmado en un laboratorio de una infección por el subtipo A(H5N2) de la gripe aviar notificado en todo el mundo. La víctima no tenía antecedentes de exposición a aves de corral u otros animales.

“Venimos detectando el comportamiento desde el 2002 y ahora se ha extendido a mamíferos. Esto nos alentó a seguir incursionando en el desarrollo de la vacuna. Teniendo experiencia en la tecnología de la ARN, buscamos las secuencias de los genomas de los virus que estaban circulando. Lo que hicimos fue modificar la secuencias, extraer unas porciones del genoma del virus de influenza, de una proteína de superficie del virus que se llama hemaglutinina”, explicó Sánchez.

El laboratorio estima que para el 2025 tendrán los estudios preclínicos y toxicológicos y en lo que resta de este año buscan reducir los candidatos vacunales, que hoy son 14, en función de la inmunogenicidad y de los rendimientos de producción. El desarrollo de la vacuna podría estar listo para el año 2026, aunque los tiempos dependen también de la construcción de una nueva planta de tecnología de ARN que Sinergium Biotech comenzó en Argentina, una de las primeras en la región. “Es una vacuna que está pensada inicialmente para humanos, pero no quita que con pequeñas modificaciones se pueda llegar a vacunar animales. Arrancamos con H5N1 y después este programa va a migrar a otros tipos de influenza estacionales, como la vacuna de gripe”, anticipó el investigador.

Una vez que el laboratorio obtenga los datos preclínicos suficientes, va a compartir la información sobre técnicas y materiales con otros fabricantes que integran el Programa de Transferencia de Tecnología de ARNm para que puedan agilizar la fabricación de esas vacunas y reforzar la preparación contra una posible pandemia.  Son empresas públicas, privadas o mixtas de países de ingresos medianos y bajos del Hemisferio Sur como Egipto, Kenia, Nigeria, Senegal, Túnez, Bangladesh, Indonesia, India, Pakistán, Serbia, Sudáfrica, Ucrania y Vietnam. La idea es que tengan la capacidad para producir vacunas de ARNm no solo para COVID, sino también para la producción de otras inmunizaciones críticas para el sistema de salud.

“Esta iniciativa ilustra a la perfección el motivo por el que la OMS creó el programa, que no es otro que el de impulsar la investigación, el desarrollo y la producción en países de ingresos medianos y bajos con el fin de prepararnos mejor para actuar eficaz y equitativamente en el caso de que se declare una pandemia”, dijo el director General de la OMS, Tedros Adhanom Ghebreyesus, durante la presentación del proyecto de gripe aviar.

“El programa intenta democratizar esta tecnología ARN, que en la pandemia estaba segmentada en Estados Unidos o en Alemania, con compañías que no transfirieron su tecnología. Lo que se vio es que así se logran respuestas más rápidas en pandemia. Tiene un rol muy importante a nivel social. Mientras más rápido sacás la vacuna, más vidas terminás salvando”, explicó Sánchez.

CDB/DM/DTC