Escándalo en el microcentro porteño por la llegada de los mormones con un templo impactante

Un templo mormón, una ONG que reclama una plaza, normas urbanísticas y un convento histórico: una manzana en disputa reabre el debate sobre el espacio público.
En la manzana delimitada por la avenida Córdoba y las calles Reconquista, San Martín y Viamonte, en pleno centro porteño, la Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días anunció la construcción de un templo mormón junto al histórico convento de Santa Catalina de Siena.
Este proyecto, que ocupa un terreno donde antes funcionaba un estacionamiento, ha generado controversia, ya que un grupo de vecinos, liderado por la ONG Basta de Demoler, impulsa una ley de expropiación para transformar la parcela en una plaza pública, priorizando la creación de un nuevo espacio verde en la ciudad.
El anuncio oficial de la iglesia destaca que el proyecto incluye una plaza verde de 3.625 metros cuadrados, que ocupará el 60 % del terreno y estará abierta al público, funcionando como un pulmón urbano. Además, se contempla un corredor peatonal que conectará la avenida Córdoba con la calle Viamonte, diseñado para proteger el entorno de la iglesia y el convento de Santa Catalina.
Por su parte, la ONG Basta de Demoler argumenta que el proyecto del templo viola las normas del Área de Protección Histórica y pone en riesgo el patrimonio arqueológico de la zona, dado que la manzana albergó el primer monasterio de mujeres de Buenos Aires, fundado en 1745.
La organización insiste en que el terreno debe ser expropiado y destinado exclusivamente a una plaza pública, una propuesta que refuerza iniciativas previas, como la presentada por el legislador Facundo del Gaiso en 2023. La posibilidad de restos arqueológicos y la oposición del Arzobispado de Buenos Aires, que considera inconveniente un templo de otra religión en una manzana históricamente católica, añaden complejidad al debate.
El diseño del templo, a cargo de la firma local BMA Arquitectos, combina elementos contemporáneos con inspiración en el art déco y el racionalismo porteño, buscando integrarse al entorno y respetar su identidad visual. El edificio, de al menos 12 pisos y con una cúpula ornamental, incluirá estacionamientos subterráneos y está en proceso de revisión por las autoridades locales. Sin embargo, el urbanista Emiliano Niebuhr advierte que la parcela, parte del Área de Arquitectura Especial 16 (AE16), tiene capacidad constructiva nula, lo que requeriría modificaciones al Código Urbanístico. Una aprobación administrativa podría derivar en la judicialización del proyecto, según el experto.
La Iglesia de Jesucristo de los Santos de los Últimos Días subraya que Argentina cuenta con casi medio millón de fieles en más de 730 congregaciones, y este sería el primer templo mormón en la Capital Federal, sumándose a otros en Ciudad Evita, Córdoba, Mendoza, y los en construcción en Bahía Blanca y San Miguel de Tucumán. El proyecto busca no solo responder a las necesidades religiosas, sino también contribuir al espacio público con áreas verdes accesibles. Sin embargo, la tensión entre desarrollo urbano y preservación patrimonial sigue siendo un obstáculo, con posturas enfrentadas entre quienes defienden el templo y quienes priorizan un espacio verde.
El historial de la manzana refleja su relevancia: originalmente perteneció al convento de Santa Catalina, con usos como huertos y cementerios, hasta que en los años 60 comenzaron las ventas de parcelas. En los 70 se construyó una torre en la esquina de Córdoba y San Martín, pero amparos judiciales y fallos frenaron otras obras, dejando el terreno como playa de estacionamiento por años. Hoy, el futuro de este espacio enfrenta un debate que combina patrimonio histórico, necesidades urbanas y demandas comunitarias, con un desenlace aún incierto.