Cómo está el poroteo en Diputados y por qué a Milei le preocupa el PRO
Los bloques opositores pidieron que el próximo 9 de octubre se trate el rechazo presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario. El panorama legislativo y las negociaciones contrarreloj que protagoniza el Gobierno.
- 📅 La Cámara de Diputados se preparará para la discusión sobre el veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario.
- 📝 El veto fue oficializado mediante un decreto publicado en el Boletín Oficial, justo después de una gran marcha universitaria.
- ⚖️ La oposición, liderada por el PRO, solicitó una sesión para intentar revertir el veto del presidente Javier Milei.
- 🚦 A pesar de la mayor coordinación reciente entre el PRO y el gobierno, no hay un acuerdo firme dentro del bloque sobre apoyar el veto.
- 🆘 Algunos legisladores del PRO y radicales planean ausentarse o abstenerse de votar.
- 🔍 La situación es incierta, con depende de muchos factores, incluyendo la influencia de conflictos internos y lealtades políticas.
- 📉 El oficialismo teme que la oposición utilice esta situación para presionar en otros temas legislativos, incluyendo el próximo presupuesto.
- ⚡ El vocero presidencial anunció que Milei aún no sabe cómo votarán los diputados, dejando claro que la situación es dinámica.
La Cámara de Diputados será el recinto en donde se enfocarán las prioridades del Poder Ejecutivo para la última semana. La razón es una sola: el arribo del veto presidencial a la Ley de Financiamiento Universitario, que ya tiene varios pedidos de parte de bloques opositores para que se convoque a una sesión el próximo miércoles y se busque revertir el rechazo del presidente Javier Milei.
Y es que este jueves se oficializó el veto presidencial con un decreto en el Boletín Oficial. Los libertarios esperaron hasta el último día para que se publique después de la multitudinaria marcha universitaria realizada ayer. La medida también tenía un doble sentido: alargar lo máximo posible los tiempos para empezar a juntar voluntades para ratificar el veto.
Todavía no pasó un mes desde que se hizo la sesión para tratar el veto a la Ley de Movilidad Jubilatoria, en la que La Libertad Avanza evitó que la oposición juntara a dos tercios de los presentes. En esa ocasión, los operados políticos libertarios se mostraban confiados de que podían conseguir el número suficiente para asegurarse el veto. Hoy el panorama luce más sombrío.
Al menos así lo esgrimen en privado varios funcionarios con los que pudo dialogar El Cronista, que afirman que la llave del éxito está en cómo se comporte el PRO, que en la sesión del veto jubilatorio le aportó al oficialismo 34 de sus 38 bancas.
Se trata del principal bloque aliado que tiene La Libertad Avanza en el Congreso. Además de haber aportado figuras clave para poder movilizar la Ley Bases y el paquete fiscal en el primer semestre, han votado de manera conjunta en casi todas las oportunidades que se han presentado. De las pocas veces en que no fue así, hubo un sector importante que acompañó igual.
Luego de que en agosto el oficialismo perdiera debates legislativos como el de DNU de la SIDE, el financiamiento educativo y la movilidad jubilatoria; Milei decidió incorporar al PRO y al MID en una especie de mesa legislativa informal para coordinar temas y estrategias para futuras sesiones. Así, todos los lunes van los principales alfiles del espacio amarillo a Casa Rosada y se reúnen con sus pares libertarios y funcionarios del Ejecutivo.
Pero en el PRO avisan que esta vez la situación será diferente. "No hay una decisión definida en el bloque", confirman altas fuentes de ese bloque en Diputados. Aunque indican que en las últimas semanas se vio más coordinación con el Gobierno, esto no sería suficiente como para convencer a varios legisladores a votar a favor del veto.
En el partido macrista afirman que el compromiso evidente que hay con el Gobierno tampoco los obliga a acompañarlos en todos los casos: esa afinidad no se trasladó a espacios de poder dentro del Gabinete y en priorización de fondos en el Presupuesto 2025. Aunque la gran mayoría votó en contra del proyecto de financiamiento cuando se votó el 15 de agosto, algunos están pensando en ausentarse o abstenerse.
Esto último también pasa con radicales con peluca (los integrantes del bloque radical que se escindieron de la posición de la UCR y votaron a favor del veto jubilatorio), que hay al menos dos que piensan en no concurrir al momento del voto. "No lo definí del todo todavía", esgrimió uno de ellos en diálogo con El Cronista.
En agosto, cuando se trató ese mismo proyecto en la Cámara de Diputados, la votación dio 143 votos afirmativos, 77 negativos, 35 ausentes y una abstención.
Tomando únicamente a quienes no asistieron en aquella ocasión: Unión por la Patria aportará a 15 legisladores y la Coalición Cívica a tres más. De los cinco diputados de Encuentro Federal que no votaron, el único que todavía no está confirmado es Ricardo López Murphy: algunos dicen que estará de viaje y otros dicen que llegará para votar junto a todo su bloque.
Para los cuatro de la UCR el tema es más difuso: Juan Carlos Polini y Gerardo Cipolini votarían a favor del proyecto; de los radicales con peluca, Mariano Campero podría ser uno de los que vote en contra de la insistencia, mientras que Luis Picat podría ausentarse.
La Libertad Avanza se asegura sumar a otros cuatro con Gerardo González (LLA), Gladys Medina (Independencia), y María de los Ángeles Moreno (Producción y Trabajo) y Nancy Picón Martínez (Producción y Trabajo).
Por el lado de los cuatro ausentes del PRO, el único que anunció su voto positivo fue el larretista Álvaro González. Se espera que el bullrichista Emmanuel Bianchetti vote en contra. La incógnita surge para el árbitro Héctor Baldassi (cercano al larretismo) y la bullrichista Sabrina Ajmechet, que es egresada de la carrera de Ciencia Política de la UBA y profesora de Pensamiento Político Argentino de esa casa de estudios.
¿Servirán los antecedentes académicos al momento de la votación? De los 34 "héroes" que contribuyeron al veto de la movilidad jubilatoria, 21 tuvieron algún tipo de paso por la educación superior pública. Esto sucede en el caso del jefe de bloque, Cristian Ritondo, que se recibió de abogado en la Universidad Nacional de Lomas de Zamora (donde también estudió Gerardo Milman).
Solo en el caso de la Universidad de Buenos Aires se cuentan diez diputados: Hernán Lombardi (Ingeniero Civil), Diego Santilli (Contador Público), Silvia Lospennato (Ciencia Política) y Alejandro Finnochiaro (Abogacía), por decir algunos.
El oficialismo presupone con una posibilidad de que el macrismo haga pase de facturas por el conflicto abierto que el expresidente tiene con la secretaria general de la Presidencia, Karina Milei, y el asesor presidencial, Santiago Caputo.
Aparece como antecedente cercano lo que sucede en la Legislatura porteña, en donde el bloque de tres legisladores que responden a Karina Milei se opone a los proyectos clave enviados por Jorge Macri. Además, su lanzamiento del partido nacional de La Libertad Avanza en territorio porteño tampoco cayó bien en el entorno del titular del PRO.
¿Es una posibilidad de que Macri le dé vía libre a sus diputados para que quién quiera pueda pronunciarse en contra del veto? En la Casa Rosada no lo descartan.
Es por eso que el oficialismo ya esboza diferentes estrategias legales ante la eventual victoria opositora en ambas cámaras (en el Senado saben que directamente no están los votos). También buscan conseguir los 87 diputados a partir de las negociaciones subterráneas por el Presupuesto 2025. Que falte menos de una semana para la presunta sesión del veto hace las reuniones sean contrarreloj.
El vocero presidencial, Manuel Adorni, afirmó en su habitual conferencia de prensa en la Casa Rosada que Milei aún no sabe "cómo se va a votar". No pudo aseverar si el expresidente Mauricio Macri le asegurará un apoyo al bloque libertario y advirtió que si el veto prospera se judicializará porque estaría violando la Ley de Administración Financiera al aumentar una partida presupuestaria y no especificar cómo se va a financiar.