En medio de la caída en el sector (-7,2% en diciembre según el Estimador Mensual de Actividad Económica (EMAE)), un rumor sobre cambios llevó a las autoridades de la Cámara Argentina de la Construcción (Camarco) a solicitar una reunión y sentarse en la mesa con el Gobierno. El transfondo y la promesa de otro al sector. 

El 5 de marzo pasado, la presidenta de la Comisión de Registro Nacional de Constructores de Obra Públicas, Rocio Soriano, y el director ejecutivo, Sebastián Orrego, se reunieron con el director nacional de Contrataciones de Obra Pública, Gustavo Enrique Fernández.

"Decreto 105/2025. Derogación del articulo 13 de la Ley 13.064", fue el motivo del encuentro que se detalló en el Registro Único de Audiencias. Las autoridades de la Cámara llegaron a la reunión con la versión de que el Gobierno iba a eliminar el Registro Nacional de Constructores de Obra Pública.

Lo que fue desmentido ni confirmado en su momento, aunque si les anticiparon que se venían cambios. "En principio nos dijeron que seguía, parecía que iba a haber menores exigencias, que se iban a bajar los requisitos de calificación en las licitaciones ", comentó a El Cronista una fuente de primera línea de la reunión.

Así, lo que pretendían supuestamente era eliminar requisitos tales como equipos, experiencia en obras similares, condiciones de capital para que cualquiera empresa pueda participar en las licitaciones siempre y cuando presente una garantía de respaldo.

En el Gobierno no confirmaron los tiempos en que estarían listos los cambios, pero sí que están trabajando en ello. "Lo dijo el ministro de Federico Sturzenegger, parten de la filosofía de ampliar el nivel de competencia, pero lo que plantean no existe en ningún lugar del mundo" apuntaron.

Pero el Decreto 105/2025 se encontraba vigente ya, por medio del cual el Gobierno eliminó el Registro. "Este nuevo sistema elimina el concepto de capacidad de contratación, que era el tope que anteriormente se le asignaba a cada empresa para la realización de obras, el mecanismo para qué tipo de obra puede tomar cada empresa no contemplará sólo la obra pública, incluso si una empresa no cuenta con antecedente podrá suplirlo con patrimonio neto o con garantías. De esta forma, más empresas podrán sumarme y competir", sostuvieron.

Fuentes especializadas explicaron que con el modelo de que "cualquier pueda participar de la licitación", es probable, que quienes no tengan experiencia presenten ofertas más bajas, pero luego las "paredes" se van a construir torcidas. "Lo que queres es una buena obra no ejecutar una garantía que más tiempo del que se piensa. La experiencia y los antecedentes valen", afirmaron.

Ahora en el sector se encuentran a la espera del Registro que les comentaron en la reunión de marzo. "El Registro como lo conocíamos históricamente no va a funcionar más, pero nos prometieron que iba a existir otro donde las empresas se iban a tener que inscribir", comentaron.

Según pudo saber este medio, en el sector mantienen dialogo directo y constante con el viceministro de Infraestructura, Martín Maccarone. Aunque no hay promesa de reactivación porque se mantiene la premisa del déficit cero.

Respecto a la deuda que tienen con el sector, que a junio pasado ascendía a $ 400.000 millones en palabras del presidente de Camarco, Gustavo Weiss, el Gobierno comenzó a cancelarla, pero sin ajuste por inflación y no hay cifras oficiales de en qué nivel se encuentra.

Sobre las recientes obras que liberó el ministro de Economía, Luis Caputo, en medio de las negociaciones en las sesiones extraordinarias a gobernadores aliados con fondos del Banco Interamericano de Desarrollo (BID) son de largo plazo.