A veces la vida regala una bendición: la posibilidad de barajar y dar de nuevo, que no es lo mismo que comenzar de cero. En medio del escándalo por un supuesto esquema de coimas con las fotomultas y el trámite de la VTV, este jueves Sergio Massa recorrerá en auto los 90 km que separan Tigre con La Plata, donde lo esperará el Gobernador Kicillof.

Esta vez, quizás más que de costumbre, el ex súper ministro y candidato a presidente tendrá un particular cuidado con respetar las velocidades máximas y que la patente de su VW Touareg no quede escrachada por los radares que controlan de velocidad.

¿A qué va Massa a La Plata? A volver a decirle a Kicillof, esta vez en la cara, que él no respalda más al ex miembro de su partido, el imputado ministro de Transporte bonaerense, Jorge "el Gordo" D´Onofrío. Buscará acordar con Kicillof su salida del gabinete bonaerense, la que no sería inmediata sino más cerca de fin de año, y de paso ofrecer un reemplazante, según confiaron fuentes de su entorno.

Se podría decir que entre Kicillof y Massa hay cordialidad y aprendieron a convivir a fuerza de necesidades e intereses comunes. Pero no hay frescura en la relación, tampoco mucha confianza y menos cariño. Malena Galmarini había rechazado de cuajo asumir como ministra de Transporte de la provincia, antes de que el ex candidato presidencial eligiera a D´Onofrio.

Se sabe que la ex titular de AySA anda con pocas vueltas y no olvida. Le pasa con Daniel Scioli y también tendría atragantado aquel "forro" que Kicillof le espetó a Massa en tiempos que parecen más lejanos de los que realmente son.

Respecto al reemplazante del ministro cuestionado aún no hay definición. Nadie sabe bien, ni siquiera Kicillof que, al parecer, le va a seguir respetando el derecho a Massa de quedarse con el Ministerio después del escándalo con D´Onofrio, a quien el tigrense le soltó la mano hace ya varios meses y asegura haberle advertido al Gobernador de sus "desprolijidades".

Como contó Clarín, Kicillof siempre respondió que sea Massa el que le ordené a D´Onofrio que renuncie a su cargo. "Sí el lo puso, que se haga cargo y lo saque", le escucharon decir en la intimidad varios funcionarios del Gabinete bonaerense. Pero al parecer, el ministro se parapetó con fuerza en su sillón.

"Es más fácil conseguir que los dinosaurios sindicales renuncien a sus gremios que convencer al gordo que largue todo", dice un ministro de Kicillof. Otro funcionario peronista provincial remarca: "No se va sin solucionar su quilombo judicial".

Lo que nadie duda, es que el costo político que está pagando Kicillof al no poder deshacerse de su sospechado ministro es inversamente proporcional a la alegría de Máximo Kichner y Wado de Pedro. "En La Cámpora no paran de comer pochoclos", señalan.

En La Plata admiten ante los medios que la excusa de la reunión cara a cara con Massa será el tema legislativo bonaerense. Desde el apoyo del Frente Renovador al presupuesto provincial de 2025, la caída de las PASO (un proyecto alentado por el massismo) y los nombres para la Justicia provincial "ambos saben mejor que nadie que le tienen que dar un corte definitivo al desquició que armó el funcionario con las fotomultas y el negocio que preparo con la VTV pero le faltó tiempo para monetizar".

Hay de todo. Los operadores de la Cámara de Transporte no paran de revolear nombres que les permita cobrar más y primero los subsidios El que más hacen difundir es el de Damián Contreras. "Ni en pedo, que sigan operando", dicen cerca de Massa.

Otro de los que suena es el Vicente Cholo Ciano, abogado y docente universitario. Oriundo de Mar del plata. "Sin chances, otra opereta", insisten en el Frente Renovador.

Nadie, por lo menos, habla mal del actual diputado provincial massista Alexis Guerrera, que se cree, sería más prolijo que el resto y con experiencia ya que reemplazo como Ministro de Transporte de la Nación al fallecido Mario Meoni durante la gestión presidencial de Alberto Fernández.