Nueve de los diez gobernadores que pertenecían a JxC estuvieron este jueves casi dos horas y media en la Casa Rosada y llevaron una batería de reclamos. No se fueron conformes.

Los mandatarios provinciales llegaron a las 11 y mantuvieron un encuentro a "agenda abierta" con el jefe de Gabinete Guillermo Francos el mismo día en que reaparecerá Mauricio Macri, que se reunió a solas con Javier Milei el martes. En rigor, no fue más que una casualidad la visita de los gobernadores, la primera tras la sanción de la Ley Bases y el paquete fiscal, terminó de cocinarse en Tucumán en la previa del Acta de Mayo.

La reunión fue a pedido de los mandatarios provinciales entre los que prima un malestar ascendente. Acusan el destrato de la Rosada, deudas cruzadas, se quejan por cambios en el área de Vialidad en sus distritos, por la falta de gestión del Ejecutivo nacional y por la caída de la economía que afecta la recaudación de las provincias.

El Presidente no se sumó al ágape, porque permaneció en Olivos. En el Salón de los Escudos, en la planta baja de la Rosada oficiaron de anfitriones, además de Francos, el vicejefe de Gabinete del Interior Lisandro Catalán; el secretario de Hacienda Carlos Guberman y el asesor presidencial Santiago Caputo.

Después de recibir a los 24 gobernadores en diciembre, Javier Milei solo recibió por separado a los mandatarios provinciales del Norte. Los de JxC reclaman en privado el mismo trato y atención para sus reclamos.

Si bien JxC ya no existe más como interbloque en el Congreso, los gobernadores radicales de Jujuy, Carlos Sadir; Corrientes; Gustavo Valdés; Mendoza, Alfredo Cornejo; Leandro Zdero, Chaco; y Santa Fe, Maximiliano Pullaro; junto a los tres del PRO, Rogelio Frigerio (Entre Ríos), Ignacio Torres (Chubut) y el jefe de gobierno porteño se mueven en tándem junto a sus pares Marcelo Orrego (San Juan) y Claudio Poggi (San Luis). Valdés, con su provincia conmocionada por el caso Loan, no fue de la partida. La unidad del bloque de gobernadores es de todos modos relativa, varios reconocen que cada distrito tiene intereses, realidades y posicionamientos políticos diferentes.

"Fue una muy buena reunión, hablamos de reactivar muchas obras", señaló Ignacio Torres, de Chubut, el único que habló con la prensa al dejar la Rosada. En privado la valoración de la mayoría de los mandatarios provinciales fue diferente, casi contraria.

Los reclamos fueron heterogéneos y vinculados a la gestión. Varios de de los gobernadores no ocultaban que pretenden cobrar su respaldo político a las iniciativas oficiales. "Desde que salieron las leyes dejaron de cumplir con nosotros", se quejó un ministro provincial.

El traspaso y la reactivación de obras que estaban paradas y que el Gobierno apuró con convenios marco para aceitar la ley bases no se plasmó del todo en la realidad. Los gobernadores oscilan entre las quejas porque las obras no terminan de ponerse en marcha y diagnósticos preocupantes. "Las rutas nunca estuvieron tan mal", dijo uno de ellos.

En efecto, los cambios en las delegaciones de Vialidad Nacional -organismo clave para el mantenimiento de rutas- en sus distritos molestaron a varios gobernadores. El último funcionario del área desplazado fue Guillermo Marcone, en Entre Ríos. Los funcionarios eyectados respondían en su mayoría a los mandatarios provinciales. Francos prometió una solución, pero en el encuentro desde le Gobierno reconocieron que se enteraron de los cambios por el Boletín Oficial.

Los gobernadores señalan que delegados de Lule Menem y Karina Milei se ubican en esas cajas estratégicas para hacer política en las provincias de cara a 2025.

Acompañados por sus secretarios de obras, economía y producción, el gobernador santafesino también tenía previsto un encuentro con Luis Caputo. Los mandatarios provinciales ven en el ministro de Economía un interlocutor más resolutivo que otros del Gabinete. La mayoría repite la misma queja y afirma que el Gobierno funciona en "compartimentos estancos".

Los cambios en Vialidad en una decena de distritos -casi todos de JxC- se produjeron después de la salida de Raúl Bértola, uno de los dirigentes "cordobesistas" que recaló en la administración nacional. El ex delegado de Juan Schiaretti fue reemplazado por Marcelo Campoy, que ya había estado al frente del organismo durante el gobierno de Carlos Menem.

Se suman, además, distintos pedidos cruzados pero compartidos por varios ejecutivos provinciales. Frigerio, Zdero, Torres y Pullaro, empujan el pedido ante la Corte Suprema para que el Gobierno pague lo adeudado por a las cajas jubilatorias provinciales que no fueron transferidas a la ANSES. Desde que asumió Milei, el Tesoro dejó enviar fondos a las provincias y anunció una auditoría para saber cuál es la verdadera deuda con las provincias -13 en total- que reclamaban porque en 2021 Alberto Fernández les congeló esas partidas.

Durante la reunión, los gobernadores y los funcionarios hablaron de la posibilidad contrastar las deudas en diferentes rubros que mantiene la Nación con las provincias y viceversa. La "solución salomónica" -como la llamó un gobernador- no le sirve a las provincias con superávit, que reclaman autorización del Ejecutivo para poder endeudarse en dólares para realizar obras de infraestructura.

El malestar de los gobernadores que visitaron la Rosada también se alimenta por la decisión del Gobierno de aumentar los subsidios al transporte en el AMBA. "Quedamos como tontos", se lamentó uno de ellos. Se quejan por la diferencia en el valor del boleto entre el AMBA y el sus distritos que no pueden explicarle a su electorado.

El jefe de Gobierno porteño Jorge Macri, que acaba de recibir luz verde en su reclamo por la coparticipación, fue el primero en retirarse de la Rosada y no hizo declaraciones. En la Ciudad hay enojo porque el pago por goteo que debía comenzar este jueves, no comenzó. “No se cumplió, lo que nos preocupa sobremanera", dicen en la jefatura de gobierno.

Esperamos que esto se corrija en los próximos días con retroactividad”.

Varios gobernadores dejaron trascender su malestar, porque -a pesar de su apoyo clave a las leyes sancionadas- señalan que no reciben un trato diferencial como otros distritos. "Les da lo mismo", se lamentan.

Tras el encuentro planteaban que buscarán diagramar la agenda en conjunto de cara al futuro en el Consejo de Mayo, donde los gobernadores tendrán un representante. Algunos de los ejecutivos provinciales piensan en el entrerriano Frigerio, economista y con largo recorrido en la función pública. El ex ministro del Interior quiere evitar el protagonismo excesivo.

Señalan con preocupación que las cuentas siguen a la baja después de la sanción del paquete fiscal. El impacto se sentirá recién a partir de septiembre y la caída de ingresos brutos y de la recaudación es cada vez más pronunciada. "El Gobierno le presta mucha atención a la macro, pero la diaria también es importante", sostuvo en privado un gobernador. Piden que el Gobierno abandone el relato e inyecte plata en sectores de la economía -la producción o el consumo- para sostener niveles de actividad y el empleo. "Ansiamos resultados mucho más rápidos que el Gobierno en materia económica", sostuvo uno de los gobernadores más alineados con la Rosada.