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La metamorfosis del peluquero asesino: tres looks en 70 días

La metamorfosis del peluquero asesino: tres looks en 70 días
policiales

El mismo día que mató a Germán Medina, su compañero en la peluquería de Recoleta, Abel Guzmán se había rapado la cabeza.Durante el tiempo en el que estuvo prófugo, el ahora detenido se dejó la barba.Qué otra cosa cambió.

AI
  • 💇 Guzmán estuvo prófugo durante 70 días después de asesinar a su colega en una peluquería de Recoleta.
  • 💇 Antes del crimen, se rapó la cabeza como premonición silenciosa de su ataque letal.
  • 💇 Fue reconocido y detenido en Moreno después de cambiarse el look y convertirse en changarín.
  • 💇 Su aspecto cambió notablemente: cabello largo, barba abundante y más delgado.
  • 💇 La peluquería donde trabajaba pudo reabrir con custodia policial tras el crimen.

Pasó 70 días prófugo, tras asesinar de un balazo a su compañero de trabajo en una peluquería de Recoleta y, en ese tiempo. Abel Guzmán intentó evadir a las autoridades con lo que mejor sabe hacer y le pedían sus clientes: cambiarse el look.

El peluquero de 43 años que pasó a matar con frialdad a su colega Germán Medina era reconocido en la peluquería Verdini, del coiffeur homónimo Facundo Verdini, por ser el colorista de cabello largo y barba de tres días que teñía las melenas de sus clientas. En el salón, solía usar el pelo atado, con colita, y con gel.

Pero cuando decidió matar al colorista Medina, se rapó la cabeza completamente, un cambio radical que fue una premonición silenciosa de su ataque letal.

Guzmán se peló el miércoles 20 de marzo, el mismo día que ejecutó a su compañero de trabajo, con los demás colaboradores sentados en ronda, mientras conversaban en una reunión en la peluquería.

En las cámaras de seguridad se lo vio escapar por la ventana con su arma de fuego y a partir de allí comenzó una búsqueda de parte de las autoridades.

Después de setenta días como prófugo de la Justicia, Guzmán fue reconocido este miércoles 29 de mayo por una vecina de Moreno, aunque la apariencia del homicida había sufrido otra metamorfosis.

El peluquero asesino volvió a modificar su look, esta vez, por razones obvias: estaba en su barrio y temía ser reconocido. Y su foto se había viralizado con el pedido de una recompensa de cinco millones de pesos.

Al momento de ser detenido, a Guzmán se lo vio distinto: se había dejado crecer el cabello y portaba una barba mucho más larga de lo que solía lucir.

Tanto que hasta el novio de la víctima hizo hincapié en la metamorfosis de Guzmán: "Está super cambiado. Si veo el video y las fotos, era prácticamente imposible encontrarlo. El cambio es muy notable. Está mucho más flaco, la barba, el pelo... Hubo un cambio radical en él", dijo Julio Mendoza, en declaraciones a TN.

Además, se lo notó más delgado que hace setenta días, otro factor que intentó cambiar para eludir a la Justicia.

En sus últimos momentos libres, el aspecto no fue lo único que Guzmán intentó cambiar. Al parecer, sin dinero para mantenerse oculto en lugares provistos por barrabravas cercanos, el peluquero cambió su oficio y mutó en changarín: ahora ofrecía cortar el pasto.

El miércoles 20 de marzo, Abel Guzmán sorprendió durante una reunión que mantenían los trabajadores de una peluquería de Beruti al 3000, en el barrio de Recoleta, y, sin perder el temple, sacó su arma de fuego para ejecutar a Germán Medina.

Tras cometer el crimen, y ante el asombro de los presentes, Guzmán se escapó por la ventana del local y se mantuvo prófugo hasta este miércoles. El peluquero asesino fue detenido por la Policía de la Ciudad en Moreno, donde lo habían reconocido.

La peluquería recién pudo reabrir el 13 de abril, con custodia policial y mediante una autorización judicial, tras una presentación del dueño del local, el coiffeur Facundo Verdini.

DS

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