Brasil: la Corte Suprema vota a favor de llevar a juicio a Bolsonaro por intento de golpe de Estado

La mayoría en el máximo tribunal de Brasil acepta la acusación de golpe de Estado contra el expresidente Bolsonaro.
La mayoría en la Corte Suprema de Brasil acepta la acusación de golpe de Estado contra el expresidente Bolsonaro.
La mayoría de un panel de jueces del Supremo Tribunal Federal aceptó los cargos contra el expresidente por un presunto intento de permanecer en el cargo después de su derrota electoral en 2022.
Tres jueces votaron a favor de enjuiciar a Bolsonaro, marcando una mayoría. El resultado será oficial después de que los cinco jueces emitan sus votos.
El mes pasado, el procurador general de Brasil acusó a Bolsonaro y a otras 33 personas de intentar un golpe de Estado que incluía un plan para envenenar a su sucesor y actual presidente Luiz Inácio Lula da Silva y matar a un juez del Supremo Tribunal Federal.
El político de extrema derecha ha negado en repetidas ocasiones haber actuado mal.
Los cargos de golpe de Estado por sí solos conllevan una pena de hasta 12 años. Junto con otros delitos de los que se le acusa, Bolsonaro podría ser condenado a 40 años de prisión si es declarado culpable.
El magistrado Alexandre de Moraes, instructor del caso en la Corte Suprema de Brasil contra Bolsonaro y enemigo jurado del ex presidente, fue el primero en votar a favor de abrir un juicio penal, y un segundo juez lo acompañó en el voto.
De Moraes consideró que hay "materialidad" e "indicios razonables" en la acusación que presentó la Fiscalía señalando a Bolsonaro como líder de la trama golpista, y dijo que la denuncia detalló la participación del exjefe de Estado en los actos citados.
El juez fue el primero de los cinco magistrados de la Sala Primera del Supremo en votar contra el exmandatario y otros siete acusados por la Fiscalía -denominado el núcleo de la conspiración golpista- en el que figuran militares de alto rango y antiguos ministros del Gobierno del ultraderechista (2019-2022).
El magistrado Flávio Dino, segundo en tomar la palabra en la sesión, acompañó el voto del instructor y solicitó la apertura del juicio penal.
Todos los acusados fueron denunciados por abolición violenta del Estado democrático de derecho, intento de golpe de Estado, implicación en organización criminal armada, daño calificado y deterioro de patrimonio.
Durante su intervención, el magistrado instructor consideró que las denuncias contra los ocho acusados proceden y están bien sustentadas, por lo que votó por la apertura de un juicio penal contra los mismos.
Al argumentar su posición en la audiencia, el juez instructor reconoció el liderazgo del ex jefe de Estado en la presunta trama golpista y dijo que los hechos fueron descritos "en forma detallada" y "satisfactoria" por la Fiscalía.
"Tuvimos un intento de golpe de Estado violentísimo (...) una violencia salvaje, con petición de intervención militar para un golpe de Estado", dijo De Moraes al argumentar su voto en la audiencia en la que se decide si se abre un juicio contra Bolsonaro.
El juez sostuvo que "la organización criminal siguió todos los pasos necesarios para derrocar al gobierno legítimamente electo" en un objetivo que "no se concretó" por "la resistencia de los comandantes del Ejército y la Fuerza Aérea las medidas de excepción".
De Moraes señaló que la conspiración empezó en 2021 y recordó la estrategia que utilizó ese año el exmandatario para "difundir noticias falsas sobre el sistema electoral brasileño".
La denuncia, presentada en febrero por la Fiscalía, acusó a Bolsonaro y a otros 33 sospechosos de tratar de anular los resultados de las elecciones de 2022 en las Lula salió victorioso y mantenerse en el poder.
Según la acusación, la conspiración desembocó en la invasión violenta las sedes del Supremo, el Congreso y la Presidencia, pocos días después de la toma de posesión de Lula.
El periódico local O Globo informó que Bolsonaro no estaría presente en el Supremo Tribunal el miércoles, a diferencia del día anterior.
El martes por la mañana en el aeropuerto de Brasilia, Bolsonaro habló con periodistas y volvió a negar las acusaciones.
“Estoy bien. Siempre espero justicia. Nada está fundamentado en las acusaciones, hechas de manera sesgada, por la Policía Federal”, dijo el exmandatario, refiriéndose al informe de 884 páginas presentado a finales de noviembre.
Agencias