La lluvia llegó con fuerza a la Ciudad de Buenos Aires y alrededores, donde se registra una gran caída de agua. El diluvio en el AMBA comenzó a generar algunas complicaciones en el transporte por la anegación de calles.

Al mismo tiempo, en Aeroparque hay un alerta roja por demoras y cancelaciones de vuelos debido a las complicaciones climatológicas que generó la tormenta que afecta a la zona del Río de la Plata.

Desde la entidad se emitieron alertas por tormentas fuertes, con posible caída de granizo, para la ciudad de Buenos Aires y la zona central del país, mientras que la temperatura bajó al menos 7 grados.

El mal tiempo obligaría a la desviación de vuelos que debían aterrizar en Ezeiza y, según trascendió, el aterrizaje de algunos se habría trasladado a Uruguay por precaución.

El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) emitió hoy alertas naranjas y amarillas por tormentas y vientos fuertes en ciudad y provincia de Buenos Aires y localidades de casi todo el centro y norte del país.

En el caso de la Ciudad de Buenos Aires, el pronóstico del SMN advierte sobre una probabilidad de entre el 70 y el 100 por ciento de que se desarrollen tormentas fuertes a lo largo de la mañana, en tanto que para la tarde se esperan lluvias aisladas.

El organismo señaló que la caída de agua estaría acompañada por fuertes ráfagas de viento, que luego del mediodía podrían alcanzar entre lo 60 y 69 kilómetros por hora y el tiempo en esta ciudad mejoraría para la noche de hoy, ya sin caída de agua prevista, pero con un cielo que continuaría mayormente nublado.

Las alertas naranjas por tormentas rigen en localidades de la costa y noroeste bonaerense, sur de Santa Fe, este de Córdoba y norte de San Luis, donde también rigen alertas amarillas por vientos.

A su vez, también registran nivel naranja, la totalidad de la provincia de Tucumán, localidades del norte de Santiago del Estero y centro de Salta.

En las zonas afectadas, el SMN prevé tormentas de variada intensidad, algunas localmente fuertes o severas, que pueden estar acompañadas por caída de granizo, fuerte actividad eléctrica, ráfagas intensas que pueden superar los 70 kilómetros por hora y especialmente abundante caída de agua en cortos períodos.