El dólar blueviene de una pronunciada baja en las últimas semanas debido al exceso de oferta de divisas, producto del blanqueo de capitales. Sin embargo, el último martes repuntó con fuerza, al subir 3,8%, aunque en la jornada siguiente recortó esa ganancia. Este jueves operó estable a $1.190 para la compra y $1.220 para la venta, según un relevamiento de Ámbito.

Entre las variantes financieras, el dólar MEP y el CCL también cortaron una racha bajista importante el miércoles, aunque cerraron dispares este jueves: en el primero de los casos con un retroceso de 29 centavos, hasta los $1.159,60; mientras que el CCL subió apenas 0,2% hasta los $1.192,86. Las brechas se ubicaron en el 18% y el 21%, respectivamente, y en 24% en el caso del blue.

El economista Federico Glustein explicó a Ámbito que la suba del blue y el bajo valor del MEP motorizó el “dólar puré”, que surge de la brecha entre ambos tipos de cambio para, luego, “asentar” los precios de ambos: el primero un poco más abajo y el segundo más arriba. “Tendremos estos rulos a medida que la brecha entre las cotizaciones no merme”, aseguró.

“Creo que el blue volverá a acercarse a los $1.200 y el MEP a posicionarse cerca de los $1.150 porque el puré MEP como lo llaman en el mercado, pondrá techos y pisos a estas cotizaciones”, vaticinó

En esa línea, Salvador Di Stefano, el “gurú del dólar blue”, analizó que al no “haber pesos en la calle, el blue debería bajar o al menos no subir”. Por eso, señaló que se mantendría en los valores actuales.

Algunos análisis coinciden en que el blue podría mantenerse en la zona de los valores actuales.

Actualmente el mercado del dólar blue, que como siempre se explica es muy pequeño y tiene una sobrerreacción a los vaivenes políticos y económicos, se encuentra con un exceso de oferta, producto del blanqueo de capitales al que ingresaron alrededor de u$s11.828 millones, entre el 15 de agosto y el 10 de octubre.

Para Gustavo Quintana, de PR Operadores de Cambio, se trata de un "reacomodamiento algo lógico después de un período de bajas continuas". Así y todo, destacó que "no responde" a un cambio de expectativas, ya que el mercado aún confía en el Gobierno, que da señales de mantener el "equilibrio fiscal" a costa de recortes en las jubilaciones y las partidas educativas.

"Creo que los precios van en busca de un nuevo punto de equilibrio, en un nivel no muy alejado de los actuales $1.220", vaticinó Quintana.

Asimismo, influye, según explicó Di Stefano, la falta de pesos que hay en el mercado gracias a la mayor demanda de créditos, que hizo que los bancos incrementaran la relación préstamos sobre depósitos. También introdujo la mejora de la actividad industrial y la demanda de pesos para ofertar productos para las fiestas de fin de año.

“Es natural que se demanden más pesos en la segunda parte del año. El reflujo después sobreviene en el mes de enero y, sobre todo, en febrero”, añadió.

Piedad Ortiz, chief economist de Wise Capital, incluyó entre los motivos de la baja de los dólares financieros a “la demanda transitoria de pesos para el pago anticipado del impuesto a los bienes personales y la moratoria impositiva”. Esas divisas, analizó, “generaron una afluencia de dólares que permeó a todos los mercados (el oficial y blue)”.

Así como influyó positivamente el blanqueo, la salida de depósitos en pesos a partir del inicio de este mes también podría influir negativamente. “El comportamiento del blue está íntimamente ligado a las pequeñas salidas de los depósitos del efectivo del blanqueo libre de disponibilidad, en algún porcentaje, y en la medida en que los agentes retiraron, seguramente, volvieron a dolarizar parte de sus pesos de libre disponibilidad del blanqueo", enfatizó Ortiz.

Por su parte, Glustein añadió que hacia fin de año habrá una mayor demanda de dólares producto del factor estacional pero también añadió que jugará un rol clave el “turismo emisor”, que suele ser superior al receptor y más en un escenario de apreciación cambiaria, adonde sale más barato vacacionar en el exterior que en algunos lugares de Argentina.