YPF y sus socios consiguieron u$s2.000 millones para el Vaca Muerta Oleoducto Sur (VMOS)

El crédito se acordó con el Citi, Deutsche Bank, Itau, JP Morgan y Santander y un pool de otros 14 bancos privados e inversores privados.
YPF y sus siete socios en la construcción del Vaca Muerta Oleoducto Sur (VMOS) consiguieron financiamiento internacional comercial privado por u$s2.000 millones para avanzar con la obra de infraestructura no pública más importante de las últimas décadas.
Según informó la petrolera de bandera, VMOS S.A. concretó la firma de un préstamo sindicado por 2.000 millones de dólares destinado a financiar la construcción del proyecto Vaca Muerta Oleoducto Sur. "Esta iniciativa estratégica permitirá liberar todo el potencial exportador de petróleo del país", definió la compañía en un comunicado de prensa enviado a Energy Report..
Los accionistas como socios Clase A de la empresa son YPF, Pluspetrol, Pan American Energy, Pampa Energía, Vista, Chevron Argentina, Shell Argentina y Tecpetrol, que se sumó a último momento. La firma estatal neuquina de gas y petróleo GyP es socio Clase B.
El financiamiento será liderado por cinco bancos de primera línea internacional: Citi, Deutsche Bank, Itau, JP Morgan y Santander e incluye la participación de un grupo de 14 bancos e inversores institucionales internacionales .
"La operación marca un hito histórico para el país ya que representa la reapertura del mercado internacional de Project Finance, cerrado desde 2019", resaltaron desde la torre de Puerto Madero.
Además, remarcaron que constituye "el mayor préstamo comercial para la realización de un proyecto de infraestructura en la historia argentina y uno de los cinco más importantes en el sector petróleo y gas en América Latina".
El préstamo tiene un plazo de 5 años y pagará una tasa de SOFR más 5,5%. El mismo permitirá financiar el 70% del capital requerido para la obra. El 30% restante será aportado por los socios.
Según los accionistas, La adhesión del VMOS al Régimen de Incentivos para Grandes Inversiones (RIGI), aprobada en noviembre de 2024, brinda estabilidad jurídica y facilita el repago con ingresos por exportaciones.
El proyecto ya se encuentra en plena construcción, con múltiples frentes de obra: el oleoducto que conectará Allen con la terminal de exportación en Punta Colorada, Río Negro; las plantas compresoras intermedias; la terminal portuaria; y la playa de almacenamiento.
El desarrollo del VMOS enfrenta desafíos técnicos complejos. Según explicó el vicepresidente de infraestrcutura de YPF Gustavo Gallino en Ámbito Debate, el oleoducto atraviesa terrenos de difícil acceso, exigiendo soluciones de ingeniería avanzadas.
En Punta Colorada, la instalación de dos monoboyas en aguas profundas, diseñadas para cargar buques VLCC con hasta 2 millones de barriles, debe garantizar operaciones seguras frente a las condiciones climáticas del Golfo San Matías.
La gestión del flowback, agua derivada de la fracturación hidráulica, representa otro desafío. Expertos proponen usar inteligencia artificial para optimizar su reciclaje, reduciendo costos y el impacto ambiental.
Además, la perforación de pozos con ramas laterales de más de 5.000 metros, como los de Loma Campana, demanda alta precisión para sostener la productividad que alimentará el oleoducto.
El VMOS podría generar entre 15.000 y 20.000 millones de dólares anuales a finales de la década, al facilitar exportaciones a mercados globales, especialmente asiáticos, con un costo competitivo de 2 a 3 dólares por barril menos que otras terminales.
El oleoducto tendrá una capacidad inicial de 550.000 barriles diarios, con posibilidad de expandirse a 700.000 barriles según la demanda.
Tal como anticiparon desde YPF a Energy Report en mayo pasado, está previsto que entre en operación hacia fines de 2026 con una capacidad de transporte inicial de 180.000 barriles diarios, que se irá incrementando hasta alcanzar una capacidad máxima de 550.000 barriles diarios en 2027.
En el comunicado que informó el financiamiento, YPF destacó que "esta es una obra estratégica para el desarrollo de todo el potencial de Vaca Muerta y permitirá alcanzar el objetivo que tiene la industria de convertir a Argentina en un exportador global de energía".
