En esta Argentina que vive al día y con el corazón en la boca porque hay un porrazo cada cinco minutos, este miércoles sobresalieron dos cosas que dejaron a varios observadores con la boca seca: Por un lado, el INDEC (con números de agosto que a esta altura pueden parecer prehistóricos) acaba de decir que la producción industrial tuvo ese mes una caída anual de nada menos que el 4,4% anual. Y, por otra parte, la titular del FMI, Kristalina Georgieva lanzó una durísima advertencia: "el éxito del plan económico argentino dependerá del acompañamiento de la gente", es decir de cómo se vote el 26 de octubre, dentro de 430 horas.

Con eso, y sin ninguna noticia desde Washington sobre la ayuda de EE.UU. a Argentina, ni siquiera con alguna frase del ministro de Economía Luis Caputo o de parte de alguno de sus acompañantes (Bausili, Daza o Quirno, que están en EE.UU. desde hace cinco días), los inversores se van inquietando cada vez más y la dolarización continúa, con un mercado cambiario en el que todos piden, al tiempo que hay un solo oferente del dólares, el Gobierno, ya sea desde el bolsillo del Tesoro o desde el Banco Central.

Así se desarrolló un día en el que el BCRA no participó de mercado de cambios y el Tesoro logró mantener inmóvil el dólar mayorista a $1.430, pero con un gasto que habría estado según fuentes del mercado en unos US$ 330 millones, por lo que a Caputo le quedan sólo US$ 470 millones de resto, cuando todavía faltan once ruedas de negocios antes de que se vote. Ante esa situación, como se están vendiendo en general más de US$ 300 millones por día, la Consultora 1816, una de las más seguidas por el mercado, anticipó que pronto el BCRA deberá salir a defender al tipo de cambio, para que no supere el techo de la banda cambiaria antes de que se vote.

Así, llegando al límite, y cada vez con los inversores más convencidos de que la ayuda del EE.UU. vendrá si y solo si a Milei le va bien en las elecciones, la Bolsa local y los ADR argentinos pudieron salvar la ropa este miércoles, en un día en el que a los mercados bursátiles les fue en general bien. Pero los bonos argentinos volvieron a sufrir, con una baja que llegó al 1,3% promedio, por lo que el riesgo país volvió a apuntar hacia arriba, con una suba de 58 unidades hasta 1.074 puntos básicos.

Esta situación bastante al límite que está mostrando el mercado financiero vino complementada además con otro tema que puede sumar mucha complicación para el presidente Milei con vistas a la segunda parte de su mandato: la Cámara de Diputados decidió ponerles un límite a los decretos presidenciales. Ahora, en campaña, se multiplican las fuerzas opositoras que quieren ganar votos para mantener sus lugares en el Congreso que viene, y apuntan con esto achicar el poder presidencial, convirtiendo a Argentina en un estado que dependerá más de las decisiones parlamentarias.

Esto se da, además, con otro dato inquietante: la dolarización de los argentinos llega a tal punto que el stock de depósitos en dólares, que había llegado a una cumbre de US$ 34.632 millones a fines de octubre del año pasado, y luego caída hasta US$ 29.132 millones el 11 de abril último, justo el día en el que el presidente Milei (a contramano de lo que le recomendaba Santiago Bausili) decidió eliminar las Lefi, están nuevamente en US$ 34.501 millones, con los inversores dejando de aumentar los depósitos en pesos, que están prácticamente planchados desde mediados del mes pasado.

Esta muy complicada situación argentina se está dando con el mundo también repleto de incertidumbres. Además de verse una desaceleración global, el Comité Federal de Mercado Abierto de la Fed difundió sus actas, donde se planteó que creen que los riesgos para el mercado laboral norteamericano aumentarán, por lo que la mayoría de los directores de la Reserva Federal considera apropiado flexibilizar más las tasas este año (ya bajó su tasa base de 4,5% a 4,25% el mes pasado, y ahora se reunirán en 20 días para resolver otro escalón bajista.

Con esto de fondo, se aplanaron este miércoles las tasas largas de EE.UU.: se pagó 3,7% anual a 1 año de plazo, 3,7% anual a 5 años, 4,1% anual a 10 años y 4,7% anual a 30 años. Y así, en el exterior el dólar subió 0,5% en Japón, 0,4% en Suiza y 0,2% contra el euro y la libre, no cambió en China y bajó 0,1% en Brasil, 0,3% en México y 0,9% en Chile.

Este miércoles, por compensaciones de comercio exterior, la autoridad monetaria perdió reservas por otros US$ 136 millones, ya que, a la espera del nuevo esquema cambiario a partir del 27 de octubre, los importadores pre-cancelan pagos y los exportadores dejaron de operar.

De este modo, el dólar oficial subió 2,07 pesos hasta 1.462,70 pesos, el blue saltó 15 pesos hasta 1.475, el Senebi subió 5,30 pesos hasta 1.475,48 pesos, el MEP subió 2,59 pesos hasta 1.532,90 pesos y el contado con liqui subió 23 centavos hasta 1.557,82 pesos. Mientras que la brecha entre oficial y blue fue del 0,8% y la del CCL con el mayorista fue del 9%.

Mientras tanto, se va perdiendo la seguridad de que los pagos de la deuda externa de 2026 no están tan asegurados como dejó entrever el secretario del Tesoro de EE.UU. Scott Bessent cuando emitía tuits. Por lo que, con más negocios, los bonos argentinos bajaron otro 1,3%, por lo que el riesgo país subió 58 unidades hasta 1.074 puntos básicos.

En papeles privados, convencidos de que la Fed abaratará costo del dinero, hubo otra rueda con tendencia alcista en la Bolsa de Nueva York, ya que el Dow no se movió, pero el S&P mejoró 0,6% y el Nasdaq subió 1,1%. Mientras que la Bolsa de San Pablo subió 0,5% y la de México mejoró 1%.

Esta vez, al mercado bursátil argentino no le fue tan mal. Con 70.084 millones de pesos operados en acciones y 157.237 millones de pesos en Cedears, la Bolsa de Buenos Aires subió este miércoles 1%. En tanto que los ADR argentinos mostraron subas del 1% al 5% para Edenor, Loma Negra, Macro, Central Puerto, Galicia y Supervielle, con bajas del 1% al 2% para IRSA y Telecom.

Por último, en commodities, se siguen viendo precios que reflejan un claro movimiento hacia la búsqueda de refugios. El petróleo subió 0,6%. Los metales preciosos están a full, ya que la onza de plata saltó 2,9% y llegó a un récord histórico de casi US$ 50, y el oro subió 1,7% hasta otro récord. Los metales básicos actuaron mixtos. En Chicago hubo mejoras tanto para la soja como para el maíz y el trigo. En Rosario el trigo subió, pero la soja bajó 0,6%. Y, finalmente, hubo una suba del 1,6% para el Bitcoin, con alzas de más del 2% para el resto de las criptomonedas.